La maestra
artesana María Luisa Balbuena Palacios y Felipe De Jesús Ramos son los
artesanos que dieron vida al barro para volverlo sahumerios o incensarios,
mismos que son parte fundamental de una de las festividades religiosas más
importantes de Izúcar de Matamoros, como lo es la cofradía del Santísimo, con
más de 350 años de antigüedad esta festividad involucra a 10 de los 14 barrios
autóctonos y tiene como día principal el día de San Pedro y San Pablo (29 de
junio), día en que se realiza el cambio de su mayordomía, este año el barrio de
Santa Catarina entregó al barrio de San Juan Coahuixtla, ambos comités están
formados por 1 mayordomo, 1 Dibutado mayor o Mandón y 10 diputados, por lo que
es costumbre que manden a elaborar 12 sahumerios de barro policromado a alguno
de los artesanos de Izúcar de Matamoros, por tercer año consecutivo tuvo el
honor de ser elegido para tal encomienda, el taller Artesanias Castillo
Balbuena de la Maestra María Luisa Balbuena Palacios artesana con más de 50
años de trayectoria y con varios premios y reconocimientos nacionales e
internacionales, la Sra. María Luisa se a especializado en árboles de la vida y
sahumerios, sus obras son de un estilo tradicional y de alta calidad por lo que
es muy buscada para casos tan especiales como lo es la cofradía del platito,
como también se le conoce, así pues el pasado 29 de junio durante esta
ceremonia del cambio de cofradía los diputados del barrio de San Juan
Coahuixtla lucieron en mano los sahumerios que por más de medio año estuvo
elaborando la maestra artesana María Luisa en su taller, cabe resaltar que
estas piezas de arte popular son icónica pues son la muestra fiel de que el
arte popular no es sólo una pieza de ornato, más bien es para uso ceremonial
desde tiempos antiquísimos y llevan el contexto cultural de nuestro pueblo,
cada sahumerio es pieza única aun cuando los comités de los barrios suelen
pedir que lleven un diseño similar tanto en el modelado como en el policromado,
comúnmente llevan como efigie principal la imagen del Santo patrón del barrio
correspondiente, en este caso fue, San Juan Bautista
texto: Jorge Castillo Balbuena